The Idle Hour Club

19.10.05

A timeless story

Desde hace como una semana que no encuentro mi reloj. Literalmente, me estoy volviendo loca. También, estoy volviendo loco a Pedro, quien de seguro ya está harto de que me la paso moviendo todo lo que hay en la casa buscando mi maldito reloj.

Por supuesto que no es el fin del mundo, ya que siempre hay otras maneras de averiguar cuál es la hora. Pero sacar el celular de la bolsa es muy tardado, el microondas siempre está muy lejos y no me gusta molestar a la gente preguntando qué hora es. ¡Yo quiero saber la hora ya, con un solo movimiento del brazo!

Hoy, después de una semana de estarlo buscando, se ocurrió que tal vez se me cayó al bote de la basura que está en la cocina, porque cuando cocino o lavo me quito el reloj y lo pongo en una barra que queda a un lado de donde está el bote de la basura... mi reloj pudo haberse caido al bote sin que me diera cuenta. Una vez así se me fue el recibo del agua y cuando lo recuperé tenía granos de café encima. Pero hoy que me asomé para buscar mi reloj vi que el bote de basura estaba vacio. Pues claro, ayer pasó el camión de la basura. Si mi reloj estaba ahí, ya se fue para siempre.


¿Dónde estás que no te veo?

Seguiré buscando, por supuesto. Todavía hay lugares en los que puede estar escondido mi reloj.

Pero por si no lo llego a encontrar: mi cumpleaños es el próximo mes y me gustan los relojes chiquitos y plateados.

2 Comments:

Blogger Kurenai said...

No te preocupues si no sale ya te conseguí un supér reemplazo. Es reloj... ¡y calculadora!

8:57 PM  
Blogger Mr. Romeo said...

que tal un reloj empotrado en el panel de un monza?

7:43 PM  

Post a Comment

Subscribe to Post Comments [Atom]

<< Home

eXTReMe Tracker